Aquí estoy, contemplando las noches y sus lunas,
deshilando los retazos de la memoria.
Arañando las heridas expuestas,
heridas que sangran hasta volverse llagas y rostros,
rostros innombrables de seres fragmentados.
El tiempo transcurre lentamente,
caen las horas como goteras.
La estúpida gota del tiempo va cayendo
y cayendo
y cayendo.
Entre los ecos mudos del silencio,
exhalando la nostalgia,
se dimensionan las sombras,
sombras crueles como la amargura de la vida.
Y aquí estoy, con una tristeza insoportable,
en medio del torbellinos de recuerdos y grafías,
con unas ansias secretas de llorar,
llorar y llorar y llorar por este corazón agrietado que flota en su propio veneno.
Medea
1 comentario:
Hola Medea, me gustado tu poesía, buscaba información sobre Medea y he visto tu blog, sigue creando con esa intensidad, yo he disfrutado leyéndote, un saludo de un artista.
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